¡Es mio, mi tessooooooro...!
le he comprado a mi hijo un móvil de juguete. Es rojo, se le iluminan las teclas, hace ruidito de llamada, dice "hola, hola" y tiene diferentes melodías. Un objeto muy interesante para un bebé de 6 meses pero un tesoro único para uno de 20 meses.
El sujeto en cuestión es mi sobrino Álvaro, que contempla como mi hijo chupetea el juguete con una cara muy extraña. ¿Recuerdas como miraba Gollum el anillo único colgado del cuello de Frodo? Pues una cosa así. Está claro lo que piensa: es maravilloso y debe ser MIO!
Como se cuanto le gustan los teléfonos yo procuro no perderlo de vista mientras cambio los pañales a Paco, pero he debido despistarme un momento porque cuando me he querido dar cuenta allí está el pequeño Gollum, bailando con el móvil único pegado a la oreja. Y a ver quién se lo quita, porque corre mucho y grita aún más ante el menor movimiento por parte de su madre y su abuelo en dirección a SU teléfono.
No es plan de tener la del Pelennor en casa de los abuelos así que al final se lo tengo que dejar y ya se lo quitarán cuando se duerma, pero tengo que comprar otro móvil igual antes de reyes.. y rezar para que el resto de primos sea demasiado mayor para interesarse por ese juguete.
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